Yo no lo dije. Es una pregunta.
Y según el columnista Geoffrey A. Fowler del Washington Post la respuesta es: Sí.
Se imaginarán el efecto que tendrá un medio como el Washington Post de llegar a muchas personas. Efectivamente ya recibí un correo preguntando mi opinión al respecto. Supongo que un artículo donde se compara a Google como una empresa de espionage debe causar mucha preocupación.
El detalle es que el artículo, por simplificar, enfoca en un solo actor algo que sucede en una industria entera. No es para menos. Los principales ingresos de Google están amarrados a la venta de publicidad online.
¿Ignoramos la ironía en que el propio medio del artículo aprovecha para mostrar publicidad engañosa?
De momento, la mayoría de estos datos, al utilizarse para mercadeo y publicidad, no van amarrados a un nombre, por lo que nadie sabe, excepto Google, lo que haces cuando navegas.
Excepto cuando suceden incidentes como el de Cambridge Analytica y Facebook.
No les voy a negar que es díficil escribir mi opinión defendiendo a Google. Y no es que piense que debo hacerlo. Solo intentaba hacer algo de abogado del diablo. Lo que si puedo opinar es que el artículo no es noticia para quienes estamos familiarizados con tecnología.
Los servicios gratuitos de Google, Facebook, et al., siempre han ido amarrados a la condición de que los datos que uno ingresa serán utilizados para mejorar sus servicios de publicidad. Esto ha sido desde el día cero.
La única novedad es que las personas, parece ser, están empezando a ver un valor en la seguridad y privacidad en línea. Antes, al no ver el valor, no sentían remordimiento alguno en regalarla.
Y no crean que las mentes maestras del mercadeo no lo saben. Y es que si ya sabían todo lo demás, como no sabrían que las personas buscan más privacidad?
Apple lleva un par de años vendiendo como una característica importante de sus productos y servicios online las medidas que ejercen para cuidar la privacidad de sus usuarios. Y son ciertas, por lo que muchas personas van a confiar en Apple para guardar sus más íntimos datos.
El artículo del Washington Post de hecho los usa como ejemplo, en conjunto con la organización sin fines de lucro Mozilla, creadores del navegador Firefox.
Pero, debemos recordar, que hace no tantos años Google mantenía una política llamada “Do No Evil”. ¿Podrá Apple mantener a futuro su política de protección a la privacidad?
Ahora, aprovechamos para dar algunos tips básicos de privacidad en el uso de cualquier navegador web:
- Utilice un bloqueador de publicidad: lastimosamente existe mucha publicidad maliciosa, que vende desde servicios innecesarios hasta malware. Estos bloqueadores permiten elegir sitios web preferidos donde se permita la publicidad, para apoyar a los sitios que a su criterio lo merezcan. Además, estos bloqueadores suelen detener también buena parte del rastreo que hacen estas empresas interesadas.
- Utilice el modo “incógnito” o de privacidad del navegador: si bien hay muchas maneras de rastrear a sus movimientos en línea, el modo incógnito ayuda enormemente a cubrir o al menos a señalar que lo que se está haciendo en línea no se desea compartir. No hay porque pensar mal sobre esta herramienta. Tiene muchos usos legítimos: buscar información médica, buscar productos para una sorpresa. Por ejemplo, yo lo utilizo para buscar información veterinaria sobre mis perros o temas de mecánica para el auto, ya que no deseo ver luego publicidad sobre estos temas.
- Sentido común: así como usted no discutiría temas privados fuera de su hogar o su entorno, recuerde que Internet es una red mundial de acceso público y al usar servicios gratuitos lo que usted publique casi siempre está siendo expuesto de la misma manera. Esto incluye el uso de servicios como WiFi público.
Y ustedes, ¿qué hacen para cuidar (o descuidar) su privacidad en línea?
Escrito desde mi Macbook Pro, usando Google Chrome
